El Gobierno tiene la intención de cerrar en un plazo de diez años los llamados centros de Educación Especial y pretende que los niños con discapacidad estudian en los colegios ordinarios. Sin embargo, esta medida de la llamada Ley Celaá choca con el deseo de muchos padres que prefieren que sus hijos continúen su educación en centros especializados.
Ante esta situación, la Plataforma Educación Inclusiva Sí, Especial También, compuesta por padres y docentes que no quieren que se elimine este tipo de educación, ha puesto en marcha diferentes medidas a las que se ha sumado el Mago More, padre de un niño con parálisis cerebral. Para ello ha publicado un vídeo en el que cuenta porqué deben mantenerse estos centros, que cubren las necesidades de los niños con discapacidad.